El mercado de impresión 3D superará los 20.000 millones de dólares en 2019

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Impresora 3D MakerBot Replicator

Canalys destaca el crecimiento que va a experimentar el mercado de impresión 3D a nivel mundial. Este año, este área superará los 5.000 millones de dólares, un 56% más que en 2014.

El mercado de impresión 3D, y los materiales y servicios asociados al mismo, alcanzará los 5.200 millones de dólares a nivel mundial este año, un 56% más que en 2014 cuando generó una facturación de 3.300 millones de dólares. Canalys espera que el crecimiento continúe en los siguientes años hasta los 20.200 millones de dólares que ingresará en 2019.

“Como esperábamos, el mercado de impresión 3D ha crecido sustancialmente en los últimos años”, afirma Joe Kempton, analista de investigación en Canalys. Estos crecimientos se deben a “la mejora de la velocidad de impresión, la existencia de una gama más amplia de materiales y de nuevas formas de fabricación. También habido un incremento sustancial del número de proveedores que se adentran en este mercado, muchos procedentes de Asia que compiten con los fabricantes de Alemania y Estados Unidos”. Joe Kempton apunta a la entrada en el mercado de impresión 3D de “jugadores tradicionales” lo que ha hecho que “el crecimiento se acelere”.

Canalys espera que en los próximos cinco años “haya más jugadores buscando consolidarse en sus propios nichos. Proveedores tradicionales como Stratasys y 3D Systems están bien posicionados para aprovechar el crecimiento del mercado de impresión 3D, aunque van a tener que hacer frente a nuevos rivales”.

La industria aeroespacial, automotriz y el sector médico continuarán siendo los principales motores del mercado de impresión 3D con compañías como GE, Boeing y BMW “invirtiendo miles de millones de dólares en tecnología”.

Las empresas “continuarán con su propia revolución” aunque “en los próximos años esperamos que el mercado de consumo avance con similar rapidez”, debido a que “muchas de las impresoras serán plug-and-play” y el precio se reducirá “hasta los 500 dólares”. No obstante, para que esto se produzca “será necesario que se mejore el rendimiento, haya una mayor variedad de materiales disponibles y se simplifique el software de impresión 3D, para hacer más fácil a los consumidores sacar partido a sus impresoras 3D y se conviertan en compradores fieles dispuestos a reemplazar sus equipos por otros más caros”. 

Redacción