Las pymes españolas invertirán entre 3.000 y 20.000 euros en su transformación digital
- En cifras
Casi ocho de cada diez empresas encuestadas por el Movimiento Impulsando Pymes afirman haber iniciado ya el proceso de digitalización en su negocio, mientras que un 14% asegura que lo pondrá en marcha el próximo año.
Las pymes españolas invertirán entre 3.000 y 20.000 euros en 2017 para iniciar o continuar su proceso de transformación digital, de acuerdo con el estudio realizado por el Movimiento Impulsando Pymes. En él han participado unas 3.000 pequeñas y medianas empresas, el 99% de las cuales son conscientes de la acuciante necesidad de empezar o continuar la transformación digital. Se trata de un proceso continuo que supondrá la renovación de su sistema organizacional, de su modelo de negocio y su modelo relacional, y que exige el correcto desarrollo de las competencias digitales para ofrecer de la mejor manera sus productos y servicios. Según el estudio, para ellas, la transformación digital es una exigencia derivada del profundo cambio que se está produciendo en la economía, la sociedad, la cultura, el medioambiente y la forma de trabajar en el mundo.
Precisamente, el 77% de las empresas encuestadas afirma haber iniciado ya el proceso de digitalización en su negocio, y un 14% asegura que lo pondrá en marcha en 2017, a pesar de que los empresarios consideran que las Administraciones Públicas no llevan a cabo políticas activas que faciliten la adopción de planes de digitalización. En palabras de Francisco Méndez, director del Movimiento Impulsando Pymes, “es importante que las pequeñas empresas puedan construir su estrategia de transformación digital con el apoyo de consultoras especializadas, y para ello, éstas deben adecuar sus servicios y también sus honorarios a las capacidades y posibilidades de las pymes”.
El estudio identifica diferentes necesidades en función del tamaño y actividad de cada negocio, lo que exige distintos niveles de inversión en transformación digital, aunque con elementos comunes. El principal es el impulso de las telecomunicaciones, que incluye la mejora de la conectividad y su extensión al conjunto de los trabajadores mejorando las redes cableadas e inalámbricas; a lo que le sigue las presencia en la web, el desarrollo de sistemas de gestión online y de comercio electrónico, y la movilidad, donde también cobra fuerza el pago por móvil.
Vinculado a esta mejora de las TIC, y dependiendo del tamaño y la actividad de las pymes consultadas, más de 50% entiende que tendrá que actualizar sus sistemas de gestión para adecuarlos a un nuevo modelo digital multicanal que integre todas las fuentes de información: online, móvil y offline. En este punto, cogen fuerza los sistemas de gestión basados en modelos SaaS, que les permiten mantenerse al día y crecer sin necesidad de invertir en equipamiento ni software, simplemente pagando por lo que usan. Y asociado a ello, la nube ha empezado a ser un elemento que cada vez tienen en cuenta más pymes, porque les ofrece importantes ahorros y un acceso a la información universal, en cualquier momento y lugar.
El informe destaca también que todavía el Big Data y el Analytics siguen siendo tecnologías que no están a su alcance. Sin embargo, un pequeño grupo de los encuestados señala que las utilizará a través de terceros como consultoras o proveedores de servicios para mejorar su presencia en el mercado, aumentar las ventas y potenciar la experiencia de los clientes. Y lo mismo sucede con el marketing online. Por el contrario, este colectivo sí ha comenzado a usar, en pequeña escala, soluciones de Business Intelligence, que les ofrecen soporte a la toma de decisiones y les permite optimizar sus estrategias de negocio.
Finalmente, las pymes encuestadas no consideran la transformación digital como una amenaza para el empleo. No obstante, el 52% afirma que ha tenido o tiene dificultades para encontrar perfiles adecuados para abordar proyectos de digitalización, y el 22% reconoce que en su empresa había puestos vacantes debido a la dificultad para encontrar candidatos idóneos. En este sentido, el 38,45% insiste en que la formación que reciben los estudiantes no les capacita para dar respuesta a las nuevas necesidades de los proyectos de digitalización.
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