Las grandes empresas financieras españolas están invirtiendo en tecnologías de IA

Los directivos de las entidades financieras españolas auguran un inesperado aumento de la productividad y la eficiencia como consecuencia de la inteligencia artificial (IA) generativa, pero el 47% de ellos reconoce que sus firmas carecen todavía de planes específicos para sus empleados. Así lo indica una encuesta realizada por EY entre una veintena de directivos españoles de entidades financieras, el 75% de los cuales augura un impacto “significativo” de esta nueva tecnología en la productividad en todas las líneas de negocio. Solo uno de cada cinco encuestados piensa que el impacto “no será significativo”.

Se espera que la IA generativa afecte a prácticamente todas las áreas de actividad de las entidades, si bien los directivos españoles consideran que los mayores beneficios se producirán en el ámbito de la eficiencia (79%), en el servicio que se presta al cliente (74%), y en la propia experiencia del empleado (63%).

La encuesta confirma que el gasto en IA generativa está creciendo en el sector financiero español: en los últimos seis a doce meses, el 53% afirmó que su empresa había invertido activamente en esta tecnología. De cara al futuro, se prevé que el gasto del sector en la integración de estas tecnologías aumente a corto plazo, ya que el 64% de los ejecutivos tiene previsto aumentar el gasto en los próximos seis a doce meses.

Pocas iniciativas de formación

Impulsar la productividad y la eficiencia en el sector financiero requerirá, al igual que en otras industrias, una mejora en la capacitación de los empleados.  En la actualidad solo el 5% de los encuestados opinan que sus empleados están “plenamente” preparados para implementar la IA generativa, aunque otro 74% opina que tienen en sus plantillas ciertos conocimientos y habilidades para trabajar con la nueva tecnología.

El 58% de los directivos predice que hasta una cuarta parte de todos los empleos necesitará acciones de formación y capacitación en el próximo año. Sin embargo, las iniciativas de formación son todavía incipientes. Casi la mitad (47%) reconoce que sus entidades carecen de planes de acción para formar a sus profesionales en las nuevas tecnologías vinculadas a la IA generativa, que evolucionan rápidamente, mientras que otro 37% afirmó contar con “planes incipientes”.  Un 11% asegura haber realizado acciones de formación para colectivos específicos y un 5% sí cuenta con planes desarrollados y puestos en marcha.

El área de especialización más demandada por los talentos cualificados, específicamente en referencia a la integración de la IA en los próximos dos años, es la ciencia de los datos y la innovación (la primera opción para el 63% de los ejecutivos encuestados), seguida de la información y la tecnología (32%) y las operaciones (11%).

“Las grandes empresas financieras españolas están invirtiendo en tecnologías de IA, con el objetivo de aumentar a medio y largo plazo la productividad, los beneficios para el cliente y la eficiencia operativa. Sin embargo, existe un importante reto para dotar a los profesionales de la formación y capacitación que necesitan”, comenta Pedro Pérez Iruela, socio responsable de Servicios Financieros de EY España. "Las tecnologías y aplicaciones vinculadas a la IA de última generación están evolucionando rápidamente. Las firmas financieras deben adoptar una mentalidad estratégica a la hora de gestionar su inversión, tanto en nuevas tecnologías como en sus profesionales. Combinar lo mejor de la tecnología y las capacidades humanas será fundamental para el éxito de la integración de la IA generativa”.

Preocupaciones que genera la IA

Cuando se les pidió que consideraran las principales preocupaciones que plantea la integración de la IA de nueva generación, los directivos españoles de servicios financieros fueron más propensos a citar la incertidumbre sobre los impactos regulatorios potenciales existentes y pendientes (42%), seguido del limitado conocimiento y experiencia de las aplicaciones de la IA de nueva generación (32%), y las cuestiones éticas que genera esta tecnología (11%).

Las preocupaciones sobre la ética de la IA generativa se centran en la privacidad (citada por el 39%), seguida de la transparencia (28%), y el potencial de discriminación, parcialidad y falta de equidad (22%). Para gestionar las posibles implicaciones éticas derivadas de la integración de la IA de nueva generación, una décima parte (11%) de los encuestados afirmó que ya han puesto en marcha un plan de ética de la IA, y otro 21% se encuentra en las primeras fases de desarrollo. Sin embargo, casi dos terceras partes (63%) de los encuestados afirma que su empresa aún no ha desarrollado un marco ético para la IA.