Cloud Networking: ¿Por qué es necesario apostar por la nube para la gestión de red?

  • Opinión
Carlos Arias Imagen

Cloud Computing es quizá una de las tendencias tecnológicas de los últimos años que está teniendo un mayor impacto en cómo las organizaciones gestionan sus TICs. Mientras que la nube está siendo utilizada desde hace años con éxito en dominios tales como el almacenamiento o la provisión de aplicaciones corporativas, sólo recientemente se ha empezado a hablar de las ventajas que este modelo tecnológico puede aportar a la hora de gestionar la red. A pesar de ello, es una tendencia que se está desarrollando a una velocidad exponencial.

Hoy día, casi tres de cada cuatro empresas están utilizando soluciones en la nube para gestionar sus infraestructuras. Según un informe de IDC, el 73% de las organizaciones tienen al menos una aplicación, o una parte de su infraestructura de TI ya en la nube. Las ventajas potenciales que aporta el cloud, en términos de flexibilidad, escalabilidad y control han atraído la atención de muchos responsables de TI, que confían en la nube para acelerar sus iniciativas de transformación digital e impulsar el crecimiento del negocio.

Lo cierto es que ha sido necesario que una serie de tecnologías complementarias, como  la virtualización de servicios de red, las arquitecturas fabric o SDN se consolidaran para que “Cloud Networking” haya sido posible. A esto hay que añadir tres nuevas tecnologías que aportan a la gestión en la nube gran parte de su valor y que son: las plataformas cloud de 3ª generación, la Inteligencia Artificial y el Aprendizaje Automático.

Gestión tradicional vs Gestión en la nube

Pero, ¿qué es lo que diferencia una gestión de red tradicional de otra basada en la nube?La gestión de red tradicional se caracteriza sobre todo por la falta de integración y automatización. Los administradores a menudo se encuentran con múltiples segmentos de red, entornos multifabricante, falta de integración de la red cableada e inalámbrica, y varias consolas de gestión. Todas las tareas de configuración se realizan a menudo de forma manual, tanto en lo que respecta a dispositivos como usuarios, con muy poco nivel de automatización.Esto genera múltiples problemas, desde la falta de agilidad para implementar servicios de red en el momento que el negocio los necesita hasta una alta propensión a caídas de red debido a los errores humanos de configuración.

La gestión de la red en modo cloud viene a resolver la mayoría de estos inconvenientes. Podríamos resumir estas ventajas con el acrónimo en inglés “FAST”: Por un lado, se incrementa notablemente la Flexibilidad de la red, y la capacidad de escalar e implementar servicios a medida que el negocio lo requiere. Se gana también Agilidad, ya que permite incorporar nuevas tecnologías e implementar actualizaciones de una forma rápida y centralizada. Una gestión en la nube contribuye a mejorar la Seguridad de la red, ya que al proporcionar una gestión unificada de toda la infraestructura, se mejora la visibilidad y control sobre usuarios y dispositivos, gracias a las herramientas de análisis. Por último, permite acceder e implementar las últimas Tecnologías al ritmo que cada organización necesita, sin tener que deshacerse de las inversiones realizadas hasta el momento.

Nube pública, privada o local

Las posibilidades de implementar la gestión de red en la nube son también amplias y flexibles. En entornos complejos de nube híbrida, la visibilidad, la automatización y las medidas de seguridad pueden simplificar la administración y mejorar la eficiencia después de la migración.

Sea cual sea el modelo, “cloud networking” proporciona administración unificada de toda la infraestructura de red (puntos de acceso wireless, switches, routers y seguridad/NAC), lo que permite gestionar desde la nube la conexión de dispositivos a red, la configuración, monitorización, resolución de problemas y la generación de informes, entre otras muchas funcionalidades.

“Cloud networking” es un gran facilitador a la hora de avanzar hacia una auténtica “organización autónoma” que es aquella que utiliza las nuevas tecnologías de automatización, inteligencia artificial y aprendizaje automático para hacer que todas las iniciativas de digitalización se integren de forma coherente, con el fin último de hacer llegar esos beneficios al usuario final y que ello se refleje en la cuenta de resultados. La red corporativa es la herramienta que permite integrar todos los sistemas de la organización para que no funcionen como nichos aislados.

Angel Arias Baelo, Senior Sales Engineer en Extreme Networks España