A los millennials todavía les gusta irse de tiendas
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El 72% de los jóvenes observa antes los productos por Internet para decidir y comparar precios, pero luego se acerca a la tienda física y los compra. En el lado contrario, hay un 56% de los jóvenes que descubre los productos en la tienda física y luego los consume online.
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Los jóvenes de entre 18 y 35 años que viven en Europa consideran que Internet y la tienda tradicional pueden coexistir, y de hecho, la mayoría prefieren la compra presencial, tanto o más que las generaciones adultas, de acuerdo a un estudio realizado por el Observatorio Cetelem de Consumo Europa 2018.
De acuerdo con el estudio, a pesar de ser nativos digitales, el 57% de los millennials consideran que comprar es un placer, y el 78% de ellos disfruta yendo a los supermercados. En este entorno de compra, los grandes almacenes situados en los centros de las ciudades son los preferidos por los jóvenes, con un 68% de calificaciones positivas, el mismo número que reciben los outlets, con productos a precio de coste.
Según el estudio, la compra online y la tienda física se complementan. El 72% de los jóvenes españoles dice que observa antes los productos por Internet para decidir y comparar precios, pero luego se acerca a la tienda física y los compra, mientras que un 69% consume determinados productos directamente online, sin consultar su disponibilidad en las tiendas. En el lado contrario, hay un 56% de los jóvenes que realiza la operación al revés, descubre los productos en la tienda física y luego los consume online para aprovechar mejores condiciones en los precios.
Para los millennials, la mayor desventaja de las tiendas físicas es la espera al pagar, seguida de la dificultad de acceso y la falta de disponibilidad de productos en algunas ocasiones. Un 81% de los jóvenes europeos creen que si las tiendas físicas tuvieran la misma información que su sitio web acudirían más a ellas y lo mismo opina un 85% en España. Por otra parte, el 55% de los millennials declara seguir a una tienda a través de sus redes sociales. Los vídeos publicados por las tiendas en las redes sociales se convierten en una fuente de información para uno de cada dos individuos encuestados.