En ruta hacia el futuro: la digitalización de mañana depende de la estrategia cloud de hoy

  • Opinión
Jacinto Cavestany

Solíamos pensar que el futuro de la economía sería tecnológico y digital, o no sería. Pero lo cierto es que ya podemos hablar del presente en dicho sentido. Hemos cruzado un punto de no retorno en la digitalización de nuestro modelo productivo. Ciberseguridad, teletrabajo, cumplimiento normativo y un entorno cada vez más complejo y exigente… La pandemia y la recuperación económica han supuesto una reescritura de dicho modelo y han obligado, una vez más, a que las grandes empresas se reinventen.

Si analizamos la historia empresarial, veremos que el cambio es una constante y, la innovación, la única garantía de competitividad en un escenario siempre incierto. Pese a los grandes cambios tan visibles y tan disruptivos de la economía digital, lo esencial permanece: la necesidad de vender más y ser más rentables, no solo ofreciendo un servicio excelente al cliente, sino adelantándonos a sus necesidades.

Eso sí… hoy debemos lograrlo a una velocidad y escala sin precedentes. Puede parecer una tarea en ocasiones imposible, pero no es así. La computación en la nube, su escalabilidad y agilidad, son la solución para afrontar la transición a un modelo digital de manera viable en costes y tiempo. Muchas empresas han reconocido esta realidad por la necesidad de adoptar un modelo híbrido que combine trabajo en remoto y presencial y, en este contexto dinámico y exigente, el cloud y las infraestructuras hiperconvergentes, la agilidad y la sencillez, son los nuevos protagonistas principales en los departamentos de TI de las empresas españolas.

Asimismo, más allá de inversiones en teletrabajo y tecnologías de videoconferencia, se está invirtiendo cada vez más en ciberseguridad y cumplimiento normativo. La ciberseguridad se ha erigido como un bien común y una responsabilidad compartida y, aquí, encontramos otro de los puntos esenciales en los que el tejido empresarial español debe demostrar en los próximos meses estar preparado tanto a nivel tecnológico como de infraestructuras para impulsar el camino hacia una economía resiliente.

Cuestión de tiempo

En resumen, aunque todavía hay organizaciones pendientes de aventurarse en su itinerario digital, solo es cuestión de tiempo. La digitalización se ha convertido en necesidad y oportunidad a partes iguales y quienes no estén dispuestos a adoptar nuevas tecnologías que velen por la competitividad y productividad de su empresa se dirigen al olvido. La pandemia ha expuesto que la seguridad y la mejora de cualquier negocio pasan por contar con una estructura digital, servidores e infraestructuras cloud sólidas en constante actualización que doten a la organización de flexibilidad ante todo tipo de situaciones futuras.

No obstante, todo gran periodo de remodelación requiere refuerzos, y todos estos cambios a los que las empresas españolas ya hacen frente se traducen también en una nueva oferta de empleo y demanda de servicios que urgen a la administración y al sector privado a colaborar para impulsar y promover la atracción, capacitación y formación digital de profesionales.

No quisiera terminar esta reflexión en torno al valor añadido de la transformación en la empresa y la adopción de una hoja de ruta concreta para un futuro basado en el cloud sin, en efecto, señalar la relevancia estratégica que, a nivel nacional, supone la capacidad de todo el tejido empresarial y educativo español para aprovechar el talento existente, potenciarlo y actualizarlo frente a una realidad cambiante y dinámica. Siendo francos, podemos decir con orgullo y sin temor a equivocarnos que nuestro país cuenta con una gran cantidad de talento digital, y con empresas capaces de ofrecer desafíos y oportunidades; pero existe un vacío entre dicha oferta y demanda de talento altamente cualificado que se agranda cada vez que se produce una disrupción de naturaleza tecnológica, y se estrecha cada vez que colaboramos totalmente alineados, desde el entorno empresarial, educativo y las administraciones públicas. Debemos seguir trabajando para garantizar nuestra competitividad y adaptarnos al cambio, sí, pero con la vista puesta en el futuro, es decir, el talento.

Jacinto Cavestany, CEO de Evolutio