Más de la mitad de los fraudes en España utilizan fotos falsas

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Los delincuentes recurren cada vez más a técnicas como cheapfakes y deepfakes como método de ataque para los fraudes biométricos. En 2023, de igual modo que la tendencia global, la actividad fraudulenta en España se ha mantenido bastante constante durante todos los días de la semana.

Onfido ha publicado su Informe sobre fraude de identidad 2024, que muestra cómo la actividad fraudulenta en España tiene una presencia constante todos los días de la semana, alcanzando una media del 2,1%. El informe destaca que el fraude está presente en nuestro país los siete días de la semana, a pesar de que la actividad fraudulenta es menor en comparación con el resto del mundo, con una media global del 3,8%.

Antes de la COVID-19, la actividad fraudulenta solía producirse durante la semana laboral y disminuía los fines de semana. Durante el pico de la pandemia, la actividad fraudulenta aumentó notablemente los fines de semana, lo que sugiere que el fraude se convirtió en una actividad recreativa. Sin embargo, en 2023, de igual modo que la tendencia global, la actividad fraudulenta en España se ha mantenido bastante constante durante todos los días de la semana.

Crece el fraude biométrico

A nivel empresarial en España, hay numerosos casos de delincuentes que emplean tácticas innovadoras para evadir los controles biométricos. El uso de fotos en las redes sociales para engañar a los sistemas biométricos a través de selfies ha aumentado enormemente, representando el 53% de los casos. El informe también indica que el fraude en España se está realizando mediante la fotografía de documentos y haciéndolos pasar por datos biométricos (35%), superando la media mundial (32,49%).

Por otra parte, los datos indican que los defraudadores empiezan a prestar más atención al fraude biométrico. Las tasas de fraude de documentos mantienen una tendencia constante. Después de registrar su punto máximo en 2021, estos se han estabilizado en los últimos años, con una media del 4,4 % en 2023.

En términos comparativos, el fraude biométrico ha experimentado un ligero aumento en el último año. La tasa media de fraude biométrico en 2023 (1,31%) duplica la de 2022 (0,68%). Cada vez más, los delincuentes utilizan un documento auténtico (obtenido por una violación de datos) para la verificación de documentos y luego modifican el rostro para el reconocimiento biométrico. Esto corrobora la tendencia emergente, los delincuentes recurren cada vez más a técnicas como cheapfakes y deepfakes como método de ataque para los fraudes biométricos, siendo la forma más creativa de ejecutarlos.